“Preparé la transición con la mayor delicadeza”, contó Melisa, y añadió que toda su familia – incluidas sus dos hijas- la acompañó en todo este proceso.
El cambio que experimentó la ahora profesora Melisa fue ampliamente difundido en el país, y desató diversas reacciones.
Pese a que la escuela la apoya y se encargó de informar debidamente a los padres sobre el “cambio” de Juan D’Oro, las opiniones de estos son divididas.
Algunos reconocen que “es una excelente profesora” y que los niños se deben acostumbrar a estos cambios”, aunque otros indican que “no saben como explicarle a sus hijos” la condición de su ahora maestra cuando estos les manifiestan sus dudas.
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