El caso de Timothy Brown, conocido como “el paciente de Berlín”, asombró al mundo. Se considera a sí mismo la “prueba viviente” de que hay cura. ¿Ciencia médica o milagro?.
TIMOTHY BROWN, CONOCIDO COMO “EL PACIENTE DE BERLÍN”.
Brown, de 47 años, un ex VIH positivo oriundo de Seattle,
Washington, saltó a la fama tras someterse a una novedosa técnica para tratar
una leucemia con células madre de un donante resistente al VIH y desde entonces
no presenta rastros del virus. Desde 2007, recibió dos transplantes de médula
ósea de alto riesgo y sigue dando negativo en la prueba del VIH, impresionando
a los investigadores y ofreciendo prometedoras perspectivas sobre cómo la
terapia genética puede llevar a la cura de la enfermedad.
"Yo soy la prueba viviente de que podría haber una cura
para el sida", arengó Brown a la agencia AFP durante una entrevista.
"Es maravilloso estar curado del VIH".
Brown se veía frágil al reunirse con periodistas en
Washington durante la XIX Conferencia Internacional del Sida, la mayor reunión
mundial sobre la pandemia, que se celebra esta semana en la capital
estadounidense.
El trasplante de médula ósea que recibió supone importantes
riesgos y puede ser fatal en uno de cada cinco pacientes. Pero Brown dijo que
lo único que padece es algún dolor de cabeza ocasional. También afirmó ser
consciente de que su condición ha generado cierta controversia, pero negó las
afirmaciones de algunos científicos que creen que todavía puede tener restos de
VIH en el cuerpo y que puede contagiar a otros. "Sí, estoy curado. Soy VIH
negativo", sentenció.
Brown contó que apoya plenamente los esfuerzos para hallar
una cura universal de la enfermedad, y dijo que se reunió con varios
científicos de alto nivel en los últimos días, que lo trataron "como a una
estrella de rock." Ahora espera aprovechar parte de esa fama para alentar
donaciones para financiar más estudios, y señaló que Europa y China gastan
mucho más en investigación para una cura del sida que los Estados Unidos.
"Hay miles de científicos muy capaces que no pueden
obtener financiación para investigar, así que quiero cambiar eso. Y hay una
gran cantidad de investigadores que estén dispuestos a trabajar para encontrar
una cura del VIH".
Ciencia médica, milagro, ¿o ambos?
Brown era un estudiante en Berlín, Alemania, cuando resultó
VIH positivo en 1995. Entonces le dieron unos dos años de vida. Sin embargo, un
año más tarde apareció en el mercado la terapia antirretroviral combinada, que
hizo que el VIH dejara de ser una sentencia de muerte para convertirse en una
enfermedad manejable para millones de personas en todo el mundo.
“El paciente de Berlín” toleraba los medicamentos bien, pero
ante una fatiga persistente visitó a un médico en 2006 y fue diagnosticado con
leucemia. Recibió quimioterapia, lo cual le provocó una neumonía y una
infección que casi lo matan.
La leucemia de Brown regresó en 2007 y a su médico, Gero
Huetter, se le ocurrió intentar un trasplante de médula ósea con un donante que
tenía una mutación del receptor CCR5. Las personas sin ese receptor parecen ser
resistentes al VIH debido a que carecen de la puerta de entrada a través del
cual el virus puede ingresar en las células. Pero estas personas son raras: se
estima que suman el 1% de la población del norte de Europa.
La novedosa técnica podría ser un intento de curar el cáncer
y el VIH al mismo tiempo. Brown fue sometido así a un trasplante de médula ósea
utilizando células madre de un donante con una mutación del CCR5, a quien nunca
ha conocido en persona. Al mismo tiempo, dejó de tomar antirretrovirales.
Pronto, no se detectaba el VIH en Brown. Pero su leucemia
regresó, y se sometió a un segundo trasplante de médula ósea en 2008,
utilizando las células madre del mismo donante.
Brown dijo que su recuperación de la segunda operación fue
más complicada y lo dejó con algunos problemas neurológicos, pero sigue estando
curado de la leucemia y el VIH.
Cuando le preguntaron si siente que su curación fue un
milagro, dudó antes de responder. "Es difícil de decir. Depende de sus
creencias religiosas, si usted quiere creer que sólo fue ciencia médica o que
se trató de una intervención divina", sostuvo. "Yo diría que es un
poco de ambas cosas".
AFP