sábado, 27 de abril de 2013

El comienzo de la Década Ganada





Contexto de la época:

Con las llamas de la crisis social y política generada en diciembre de 2001 aun encendida, el entonces presidente Eduardo Duhalde convocó a elecciones generales.

El Partido Justicialista, tomó la decisión inédita de suspender la elección interna y permitir a todos los precandidatos el uso de los símbolos partidarios comunes para  ir a la elección. De esta manera, Carlos Menem, Néstor Kirchner y Adolfo Rodríguez Saá se presentaron bajo el ala del peronismo.

Al no alcanzar el 45%, Menem y Kirchner pasaron a la segunda ronda. El balotaje debía celebrarse el 18 de mayo, pero al vislumbrar una inminente derrota ante Kirchner, Menem retiró su candidatura.

Ese domingo se declaró el triunfo del santacruceño que marcó el inicio de la era K en el Gobierno.



10 años de cambios:

            Quién hubiera pensado que ese proceso iniciado en aquel momento, como resultado de la necesidad del justicialismo de encontrar el caudal de votos que hicieran frente a la decadencia en la que se encontraba el histórico partido, tendría como resultado la transformación de la historia nacional???

            Dadas las inconsistencias que se venían produciendo dentro de la estructura más emblemática de la Argentina, el Partido Justicialista, las alternativas existentes eran pocas –al menos, para buscar una alternativa viable, para no solamente sostener la idea neoliberal de Carlos Menem-.
           
            Inteligentemente el encargado del Ejecutivo Nacional, Eduardo Duhalde, comienza su búsqueda entre algunas alternativas que se encontraban en el interior de las Provincias Argentinas. Tal es el caso que, las posibilidades se terminan volcando en dos Gobernantes que, debían hacer una gran labor para poder ser reconocidos en el resto del País, antes de plasmar sus chances presidenciables.
           
José Manuel de la Sota (Gobernador de Córdoba) y – el que terminó por iniciar la transformación nacional – el santacruceño Néstor Carlos Kirchner.
           
Ante las imposibilidades numéricas que siempre frenaron al cordobés, en las encuestas y el electorado, y, el laborioso esfuerzo demostrado en sus recorridos por todo el País de Kirchner, Duhalde entiende con rapidez que las chances de éste últimos, eran las únicas herramientas de las que se podía valer para cambiar las chances del ex mandatario riojano que aspiraba a volver a gobernar.

Con muchos viajes, recorriendo localidades muy pequeñas, industrias, empresas y distintos distritos de la República, Néstor comenzó a transmitir su sencillo, poco protocolar y hasta simple mensaje que, se terminó de constituir, tras un día como el de hoy pero, desde hace 10 años.

En aquella fría e inhóspita jornada, el Dr. Menem se imponía en las urnas con el 24.45% de los sufragios, seguido por el “Pingüino” – como se lo comenzó a llamar – Kirchner con el 22.24% de los mismos y, en tercer lugar, por el ex Ministro de Economía, Ricardo López Murphy, con el 16.37%. Los números marcaban con claridad (para quienes hicieran un análisis práctico y sencillo) que, el 75% (aproximadamente) de los Argentinos, deseaban que se cambiara el modelo Neoliberal que siempre impulsó el exgobernador de La Rioja.

Ante resultados tan directos, que sentenciaban el quiebre en el rumbo que tuvo ese sistema de gobierno y, completamente impactados y dolidos por la fuerte crisis que nos afectó en el año 2001, Kirchner ya tenía las mayores posibilidades de ganar por amplio margen (en el ballotage), ante Menen.

Ello es lo que  lleva a que, unos días después, en un mensaje que hizo creer en sueños nuevos, en alternativas distintas, ganas y promesas de conquistas sociales, que el ex mandatario, renunciara a la segunda vuelta, sin llegar a perder en las urnas.

            Hoy, tras haber pasado ya 10 años de aquel día, podemos apreciar que, los anhelos de la sociedad se han ido realizando. Se ha un recambio generacional, en el que hay integración, redistribución más equitativa de las riquezas, mayor PBI per cápita, industrialización, nuevos mercados comerciales mundiales, reivindicación de los Derechos Humanos – con el juzgamiento y la condena de muchos de los que perpetraron la mayor masacre de la Historia Argentina, los militares culpables -, pago de los compromisos económicos con los Organismos internacionales, impulso de nacionalización de las Empresas que habían sido privatizadas durante el menemato y, la inclusión definitiva de la Juventud en la vida Política de nuestra Patria.



- "A los jóvenes les digo sean transgresores, opinen, la juventud tiene que ser un punto de inflexión del nuevo tiempo". Néstor Carlos Kirchner