Según confirmó Emergencias de Asturias, Begonia Muñiz se encontraba cocinando en su vivienda, un cuarto piso de un edificio ubicado en Gijón, cuando la olla a presión estalló, por causas que aún se están investigando.
Las mismas fuentes indicaron que la explosión se produjo mientras la mujer manipulaba la olla y que la onda expansiva le alcanzó directamente en la cabeza.
Tras el aviso por parte de los vecinos, al domicilio se desplazaron miembros de la Policía Local y Nacional, así como un equipo sanitario que sólo pudo certificar el fallecimiento de la mujer.
Los equipos médicos tuvieron que atender además tanto al marido de la fallecida como a una pareja de vecinos que se encontraban en estado de shock tras el suceso, ocurrido a las 14, hora española.
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